LANA MERINO: La lana Merino es un producto 100% natural, proveniente de la oveja merina.
Es originaria de España y, hoy en día, se cría en la Península ibérica, en el sur de África, en Estados Unidos y en Chile.
Son tejidos suaves al tacto, sedosos, con propiedades de protección contra los rayos UV. Mantiene la temperatura corporal, no es inflamable y no absorbe ni genera olores, ya que la queratina, la proteína de la que está hecha la fibra, descompone las bacterias que causan los olores.
Todas estas características la transformaron en una lana de lujo, con buena vida útil y con versátiles usos en el mundo textil.
LAVADO: No te recomendamos lavar las prendas de lana merino, la lana merino es conocida por ser auto-limpiante, solo con ventilarla es suficiente. Si por algún motivo tienes una mancha que debes eliminar, te recomendamos siempre lavar con agua fría, ya que ésta fibra con el calor se podría encoger y deformar. Usa jabón neutro o un detergente para prendas delicadas. Si optas por el lavado a máquina, es buena idea proteger la prenda con una bolsa o malla de tela, para evitar roces y rasgaduras. Elige un ciclo corto delicado y evita el centrifugado.
SECADO: El secado debes hacerlo de manera horizontal, porque si cuelgas la prenda puede sufrir alguna alteración en su largo o ancho. Lo ideal es poner una toalla y sobre ella, la prenda estirada. No seques la prenda directa al sol, ya que puede sufrir decoloraciones y quedar manchada.
PLANCHADO: Generalmente, una prenda de lana merino no necesita planchado, te recomendamos un baño de vapor, mientras te duches puedes dejarla en el baño y por la temperatura eliminara las arrugas. La lana merino y en general las lanas se acomodan con la temperatura corporal durante el uso.
* Recuerda siempre planchar la prenda por el reverso.